Cómo fomentar la curiosidad científica desde temprana edad a través de la inteligencia naturalista
La curiosidad es la chispa que impulsa el aprendizaje en los niños. Desde que son bebés, exploran el mundo a través de los sentidos, el juego y la observación. Fomentar la curiosidad científica en la primera infancia no solo despierta el interés por el conocimiento, sino que también fortalece habilidades de pensamiento crítico, resolución de problemas y creatividad.